Con la celebración de la Vigilia Pascual han finalizado los cultos de nuestra Semana Santa. Cultos que se han destacado por la gran participación de la feligresía y con algunas innovaciones en su celebración.

                Comenzaba con la Celebración de la Penitencia el Lunes en que párrocos de las localidades serranas se dieron cita en nuestra Parroquia para atender a los fieles que desearan confesarse.

                 El Martes Santo se celebró el Vía Crucis que ya adelantamos en una noticia anterior.

                 En los Oficios del Jueves y del Viernes Santo, y con la nueva disposición de las bancas que se han hecho en el Templo, hizo posible que el gran número de asistentes a los mismos pudieran estar acomodados en la celebración sentados. Sobrio y solemne el monumento que se instaló en la Capilla del Sagrario. En las ofrendas se depositó un cuadro de Caritas Diocesana, por cuya causa se hacían las demandas de las bacinillas en el día del Jueves Santo.

                  La Celebración de la Vigilia Pascual, la fiesta más importante para los cristianos, se rompieron todos los pronósticos, en cuanto asistencia y a participación. A pesar de su duración, dos horas y media, a todos los presentes les resultó amena y corta. Comenzó el Lucernario o Rito  de la Luz en la Plaza de la Iglesia, en la se había encendido una fogata ydonde todos los fieles encendieron las velas del Cirio Pascual; entrando posteriormente para la Liturgia de la Palabra. En la Renovación de las Promesas Bautismales los fieles fueron tomando agua de la pila bautismal  depositándola en la cabeza. Hacía muchos años que no se congregaban tantos jóvenes en nuestro Parroquia.

                   Al término de la celebración, y como viene siendo habitual se brindó por la Resurrección y nuestro Párroco D. Antonio Aguilar, que dio la paz a todos los asistentes, conversó con los fieles a la salida.

                    En ésta ocasión, a propuesta del Párroco, se dejaron en el Templo los Pasos de Misterio de nuestras Hermandades y Cofradías, algo que resultó bastante bonito y tuvo mucha aceptación por parte de los fieles.