Esta nueva sección que coloco en la página, en el apartado “Villa de
Espera”, no quiere ser otra cosa que el lugar donde los espereños
vean el reflejo de la vida culinaria de nuestros antepasados sobre
todo y, de la evolución que ha tenido a lo largo del tiempo. Tan
solo podemos, en un principio, usar la tradición oral que nos han
legado en el transcurso de los años.
Debemos recordar muchos de los
condicionantes que tiene nuestra gastronomía y las distintas
modificaciones con que ha evolucionado:
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El primero de ellos ha sido el nivel
económico de la gran mayoría de los espereños a través de los
siglos que es fiel reflejo de esa cocina de origen humilde y
100% aprovechable y práctica.
-
Los ingredientes de los distintos platos
han estado condicionado a época del año conjugando los distintos
cultivos que en ellos se empleaban y las necesidades
nutricionales por las distintas faenas que se realizaban.
-
Las recetas se definían por dos factores
en muchos de los casos: en uno de ellos, el tiempo de
elaboración, como el caso de esa cocina que tenían que
improvisar los gañanes en mitad de las faenas del campo con esas
sopas de pan acompañadas con tomate, espárragos, vinagretas o
cualquier otra cosa que hubiera a mano; en otros casos, cuando
se elaboraba con tiempo en la casa debía ser un plato que se
pudiera servir en más de una ocasión, tal es el caso del puchero
al que se podía añadir leguminosas, cereales o pastas, y el
potaje que después de varias comidas se le añadía el arroz
necesario para completar la última y cuyos condimentos venían
forzados por lo que hubiera sido posible adquirir, incluso
aquella colita de bacalao.
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La mayoría de los ingredientes de los
distintos platos eran los que la madre naturaleza te daba en
esos momentos: tagarninas, espárragos, caracoles, cabrillas,
hinojos, etc… y que se aderezaban con los distintos condimentos
en algunos casos que en esa fecha se encontraban como el “cardo
correo” y “el poleo” en el caso de los caracoles.
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Hay que resaltar que la exquisitez y a la
vez humildad de nuestros platos se lo debemos en gran parte a la
gran herencia árabe que recibimos y que , hoy en día, son muchos
los maestros de cocina que se atribuyen dichos encantos.
El carácter humilde de ésta cocina no
mermaba en absoluto la exquisitez de dichos platos, que en muchos
casos han llegado a nuestros días como platos de alto nivel y en
algunos casos de lujo.
Puede que ésta necesidad de la
que hablamos, que en alguna época no fue solo económica sino de
suministros las familias espereños agudizaran el ingenio y en muchos
casos improvisaban la comida a preparar cuando miraban aquella
despensa vacía y diciendo: ¿qué hago de comer hoy? Esto hizo que se
crearan nuevas variantes de esas recetas que conocían y que se podía
elaborar con algún que otro ingrediente de menos.
Espero que seáis un poco benévolo
con ésta nueva sección en la que comenzaré poniendo algunas recetas
rescatadas por mi hermana Ana, a la que le gusta mucho la cocina y
la que una y otra vez me ha insistido en que pusiera ésta sección .
En ella iré añadiendo cuantas me enviéis, que espero sean muchas,
todos los espereños y espereñas que visitáis ésta página y que
consideréis de interés o curiosidad. Quiero centrarme en los platos
“origen” (por llamarlos de alguna forma), pues como hemos dicho
anteriormente, de cada uno de ellos podremos encontrar muchísimas
variantes.
Todos
aquellos que queráis enviar alguna receta, ya sea de nuestros
antepasados o de las que hoy elaboramos, lo podéis hacer enviándome
un email.