Facilitemos el encuentro con el Señor

      Venid a mi todos los que estáis cansados y agobiados y yo os aliviaré. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mi, que soy manso y humilde de corazón. Y hallaréis descanso para vuestras almas, porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera" (Mt 11,28-30 )

En la llaga del Santo Cristo tiene cabida todo el pueblo de Espera, los de lejos y los de cerca, los que le buscan y los que se desentienden, pero de una manera muy especial aquellos que sienten más en su propia vida las carencias y las pobrezas: enfermos, ancianos, emigrantes, jóvenes desorientados, buscadores de sentido, niños desvalidos y todo aquel que tiene hambre de salvación y como el ciego del Evangelio grita para acercarse a ÉL

Todos tenemos la obligación de  darnos un empujoncito, de motivarnos mutuamente, de ser esa vereda que facilita a l@s Espereñ@s el encuentro con su Señor.

No escatimemos esfuerzos, revistámonos de los sentimientos de Cristo y demos todo lo mejor de nosotros mismos en estos días tan memorables para el pueblo.