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REVISTA DEL CRISTO 2003

Al lotero de mi pueblo

 

AL LOTERO DE MI PUEBLO

 

        En cada lugar hay personajes populares que sin ser nada son mucho.

 

        Con motivo de su muerte quiero rendir homenaje a: D. MANUEL FERRERA VELARDE (Ricardo-El Zorro) publicado unos versos que son su beneplácito escribí el año 74, tratando de hacer una fotografía literaria de su persona y entorno. (D.E.P.)

 

AL LOTERO ESPEREÑO

 

Al lotero de mi pueblo

¿Por qué le llamarán bicho?

Si sólo tiene dos manos

Cuando tanto presumimos

De tener respeto humano.

 

No sabría yo afirmar

Poniendo el dedo en la llaga

Si es un bicho de verdad

O sólo es que se lo llaman.

 

Las madres equivocadas

Con él asustan a los niños

Y él cuando los encuentra

Los halaga con cariño.

 

No conoce ningún banco

Ni letras ni financiera

Él duerme como un lirón

De noche cuando se acuesta.

 

Nunca mira para saber

Si el cielo está despejado

O está a punto de llover

Ni lo que ha dicho Mariano

Ni si va a subir el café.

 

Él sueña con dar el gordo

En un trece mil y pico

Lo demás está chupado

Que se preocupen los ricos.

 

Con barba de varios días

Y su cabeza rapada

Con su chaqueta de paño

Y sus piernas separadas.

 

Camina siempre camina

Llevando en su mano suerte

Diciendo aquí llevo el gordo

Que ni él mismo se lo cree.

 

Pero lo hace creer

Y unos pican y otros no

Hasta el día de la jugada

Que es la desilusión.

 

Entonces da el capotazo

Y nos dice con salero

No hay que apurarse señores

Para la próxima jugada ya

Estamos de los primeros.

 

Lo dice como él lava

Como quien no dice nada

Aquí está el gordo, señores

Para la próxima jugada.

 

Si lo entretiene un melena

Que luego no compra nada

Lo mira de arriba abajo

Le dice quita, monada

Tienes tipo de marrajo

Recórtate la peluca

O te vas al... camino de allí abajo.

 

Si se encuentra un labrador

le dice con mil amores

qué buen tiempo, D. José

para sembrar sus girasoles.

 

Y D. José le contesta

Pero bicho, ¿en qué estás pensando?

Si la cosecha está tardía

Y ya la estamos segando.

 

Perdone Vd., D. José

Despistaíllo que es uno

Aquí tengo trece mil

Que termina en veintiuno

Que como salga premiado

Vd. A Palma de Mallorca

Y yo a Palma del Condado.

 

Si se encuentra uno de corbata

De profesión comerciante

Lo mira más receloso

Y piensa: éste es más tunante.

 

Y le dice muy bajito

Poniéndose muy educado

Cuánto celebro D. Pedro

Que hayan subido el bacalado

Porque sé de buena tinta

Que a Vd. lo ha cogido cardo

Pero haría mejor negocio

Si me comprara estos dos

Que terminan en tres ocho.

 

Al encontrar un obrero

Le dice muy decidido

Me he enterado, Manolillo

Que están los sueldos subidos

Pero tú no te conformes

Que un pellizquillo del trece

Es lo que te haría un hombre.

 

Y Manolillo responde

Con la sonrisa en la boca

Pues dame la serie entera

Te pagaré si me toca.

 

Toma un décimo y ya vale

Los demás son encargados

Y por tratarse de ti

Te lo dejo hasta el sábado.

 

Trae dos por lo que ocurra

Y no digas que es fiado

Que esto te lo pago yo

Con los aumentos atrasados.

 

Y así discurre la vida

De este hombre singular

Que va repartiendo suerte

Para los que quieren picar.

 

Nunca formó una familia

Él lo dice muy ufano

¿Para qué buscar problemas?

Si todos somos hermanos.

 

Nadie a mí me pide cuentas

Ni tampoco yo las doy

Yo estoy contento conmigo

Y me quiero como soy

Sólo me encuentro amargado

Cuando le pegan o empatan

 

Al Atleti de Bilbao

O si me entero...

Que Iríbar está un poco resfriado.

 

Lo  demás es secundario

Que si el mercado común

Que si suben los salarios

Que si han subido a la luna

Que si baja la aceituna

Que si hay junta de gobierno

Que el Madrid está arrestado

Por mí que se vaya al cuerno

Con los árbitros pagados

Lo mío es repartir suerte

Y que la coja el Bilbao.

 

Ya que para Vd. no la tengo

Como lo siento lo digo

Que los niños de S. Ildefonso

La tienen tomada conmigo

Y cuando yo vendo un quince

Ellos sacan veinticinco

Pero como un día se equivoquen

Y demos el tropezón

Aquí se acaba el Tío Pepe

Por la gloria del cotón

Se van a enterar en Tarifa

En Roma y en S. Antón.

 

Que los que no compran nunca

Y pongan cara de perro

se conforman con decir

ya el bicho no da reintegro.

 

Quién se iba a imaginar

Que este bicho de dos manos

Iba a dar esta Navidad

El primero de la serie

El gordo y algunos más.

 

Y las solteras cuajadas

Pensarán en la tajada

Y dirán a boca llena

Sin mudar el color de cara.

 

Ay!, si picara este bicho

Ay!, si este bicho picara

Ay!, qué feliz que me haría

Con su cabeza pelada

Y barba de varios días.

 

Con los años que una lleva

Esperando una ocasión

Verse con un bicho rico

¡Ay madre que tentación!

 

Y yo me digo confuso

Si fuese realidad

Que el bicho diera el mordisco

Una feliz Navidad.

 

Pero han consultado los astros

Y a una sabia de Toledo

Y aquí está previsto el gordo

Para el año tres mil quinientos.

 

Que por buenas que nos vengan

Y se resista la gente

Eso no lo conocemos

Ninguno de los presentes.

 

Pero siga la ilusión

Que esa es la sal de la vida

Y cuando encontremos al bicho

Juguemos a la lotería.

  

Miguel Rodríguez Ardila   1974

  

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