Volver a Fiestas del Santo Cristo 2002                                                                           Volver a Índice de Artículos

REVISTA DEL CRISTO 2002

IN MEMORIAM 

Alonso Lozano Arias

                  Los más pesimistas comentan hoy día  que  todo es puro mercantilismo, que hasta las cosas más bellas se pueden  comprar y vender, como si hubiéramos  convertido el mundo en un gran mercado en el  que  todo  tiene  precio;  pero  hay algo de lo que están revestidos los grandes hombres y que  no se cotiza en bolsa: LA FIDELIDAD. De esta virtud estaba revestido nuestro querido hermano Alonso y esta virtud la puso siempre al servicio de  la Parroquia y de todos los sacerdotes que hemos tenido la responsabilidad de trabajar en ella a lo largo de  sus años de servicio.

                Vivaracho y despierto como nadie, supo encarnar la tradición de siempre. Desde su vestimenta impecable cuando  servía el Altar hasta las necesidades más cotidianas que  tiene la Parroquia, junto al saber adaptarse a  los signos de los tiempos sabiendo distinguir con el discernimiento propio que le caracterizaba  lo fundamental de lo accidental.

                Poco tiempo pude disfrutar de sus sabios consejos, de su cercanía y de su amistad, pero con tanta  intensidad como el aprendiz que, ávido de respuestas y de consejos quiere concentrar en poco  tiempo lo que la experiencia de otro le puede aportar.

                Cuando  ya este libro estaba en imprenta, nos  sorprendió a  todos el trágico accidente de nuestro hermano Alonso. Su  cuerpo quedó destrozado, pero su alma más entera que nunca subió al cielo, porque como  nos recuerda San Pablo: “Si vivimos, vivimos  para el Señor y si morimos,  morimos para el Señor, en la vida y en la muerte somos del Señor” (Rm. 14, 8)

                Estoy convencido que, por su LABORIOSIDAD Y CARÁCTER  también Dios Le habrá dado algún empleo en la patria celestial y el mismo convencimiento abriga en mí,  la certera esperanza que desde allí nos sigue  echando una mano.

                Fue a la Función de la Virgen y tuvo la satisfacción de vivirla. Cuando nosotros, el próximo día  15 de Septiembre celebremos la Función del Santo Cristo, el ya nos  estará bendiciendo desde el cielo; por eso este año, la solemnidad de nuestros cultos y las Fiestas Patronales tienen  más sabor de eternidad  que nunca y entrelazan con más fuerza el cielo  con la tierra.

                 ¡Gracias Alonso, en nombre de tu último párroco y en nombre de tu Comunidad Parroquial a la que con tanto mimo y entrega serviste siempre!

                ¡DESCANSA EN PAZ!

Volver a Fiestas del Santo Cristo 2002

[ Página Principal ] [Noticias] [ Artículos ] [Directorio Espereño][Actualidad] [Villa de Espera] [Cofradía de la Soledad] [Asociación Cult. Ntra. Sra. Soledad] [ Emigrantes ] [Agricultura] [Datos e Informes] [Planos] [Guía de Empresas] [Fotos de Interés] [ Gastronomía ] [Links] [Contacta conmigo]

E-mail 

@ Antonio Durán Azcárate. 2001  - 2006  Espera ( Cádiz ) ANDALUCÍA - ESPAÑA