Una nueva, multitudinaria y cordial experiencia la que hemos tenido ésta tarde-noche en la Iglesia Parroquial de Santa María de Gracia.

                En ella se ha celebrado la Zambomba que habitualmente veníamos celebrando estos años anteriores y que por la interinidad de nuestro Consistorio se quedaba sin sitio. Es por ello que nuestra Parroquia no solamente se ofreció a acoger dicho evento sino que propuso a la comunidad parroquial celebrar ese mismo día una buñuelada para celebrar a la vez una convivencia entre la feligresía animada por las distintas actuaciones que estaban previsto se celebraran ésta noche.

                 Ni un atisbo siquiera se tenía del eco entre nuestros paisanos a predecir la asistencia a ésta Zambomba-Buñuelada en una tarde fría, y sobre todo, muy desapacible y desagradable, por el viento, la llovizna y como hemos dicho mucho frío. Nunca mejor dicho se cumplió el refrán: "A mal tiempo, buena cara". El templo parroquial se encontraba a rebosar, como también estuviera en la celebración eucarística dominical celebrada a mediodía; parece que la invitación de nuestro párroco en dicha misa dominical no cayó en saco roto y fruto de ello ha sido la masiva afluencia de feligreses.

                  Puntualmente, a las ocho de la tarde dio comienzo las actuaciones del Coro Rociero de Espera y del Coro de Campanilleros de Nuestro Padre Jesús Cautivo de la vecina Las Cabezas de San Juan. Al término de la segunda actuación se ofreció una copa a elegir entre moscatel o anís o chocolate acompañados de buñuelos a los  asistentes; algo que debemos de recordar en el futuro, porque se ha sabido compaginar perfectamente el espíritu festivo del acto, con el gran respeto de los asistentes al lugar sagrado en el que nos encontrábamos. Se prosiguió con las actuaciones del Coro de Belenistas de Puerto Real y el Coro de Campanilleros Santa María de Gracia de nuestra  Parroquia.

                  Al término del mismo se continuó con las degustaciones en el Salón Parroquial.

                   En ésta ocasión son muchos los sobresalientes que habría que otorgar en éste nuevo examen de nuestro pueblo:
En primer lugar, el comportamiento de los asistentes, pequeños y mayores, donde ha brillado el gran respeto hacia nuestra Iglesia, sobre todo ante la eventual imposibilidad de ofrecer las copas en el patio de la Iglesia por las condiciones meteorológicas; en segundo lugar la participación de nuestros Coros, el Rociero y el Parroquial, que han hecho vibrar a sus paisanos con esas alabanzas a la pronta venida de nuestro Salvador; y por último la gran colaboración hacia nuestra parroquia por parte de mucha gente, con mención especial hacia el grupo de mujeres que desde las seis de la tarde preparaban todo lo relacionado con los buñuelos.

                  De igual forma que con las calificaciones, habría que hacer con las felicitaciones, pues debemos de felicitar a todos los que han hecho posible éste gran acontecimiento navideño: a nuestro Párroco, a nuestro Ayuntamiento y sobre todo a los vecinos que recordaran esta grata experiencia en un día nada grato, si es que del tiempo hablamos. Y además, en unos tiempos en los que se intenta mermar y quitar protagonismo a nuestra mayoritaria creencia religiosa, los cristianos debemos de sumar y aunar para que se nos haga mas fácil el camino, y podamos ofrecer más servicio a los demás, hoy tan necesitados.   

                  Terminemos como debe ser, con un deseo de unas Felices Fiestas a todos,  sobre todo a aquellos que por algún motivo no han podido acompañarnos ésta noche, y no se le ha podido desear en dicho acto.